En riesgo Australian Open
Australia se consume entre humo, fuego y cenizas, viendo cómo el paraíso puede tornar en infierno, y es muy difícil jugar al tenis en el infierno. La ATP Cup se está desarrollando con normalidad a pesar de que todo el país luche por su supervivencia y la de su hábitat, pero la situación está comenzando a ser crítica y el estado emocional y ambiental no parecen compatibles con una fiesta del tenis como supone el Open de Australia 2020. El primer Grand Slam arrancará el 20 de enero, pero cuatro días antes empezará a disputarse la fase previa. O al menos debería. Porque después de las duras palabras de Novak Djokovic tras conocerse datos de la calidad del aire en Melbourne, la organización se está planteando el atraso, la suspensión e incluso la disputa del torneo en pistas indoor, según informa el diario TheTimes
«En esta época del año sabemos que nos enfrentamos a condiciones extremas en Australia, pero cuando se llega a niveles en los que la salud está en juego, creo que hay que considerar algunos cambios», reclamó Djokovic después de conocerse que los parámetros del aire que se respira en la capital del Estado de Victoria, alcanzan niveles de extremo peligro para la salud, según el indicador internacional ICA, que establece que con valores superiores a 150 la calidad del aire es muy mala. En Melbourne, las mediciones realizadas hace apenas unas horas han arrojado datos de 213.
Todo indica que la organización del torneo tendrá que tomar decisiones drásticas si este parámetro no baja de los 200, ya que jugar al tenis en estas condiciones parece imposible.
Habrá que estar atentos a lo que sucede porque el Open de Australia 2020 está en serio entredicho.
