Acá por la Sierra Madre

Doble amarilla para Ebrad

Publicado el 05 de mayo de 2015

La semana pasada la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federaciónrevocó el registro de la candidatura otorgada a Marcelo Ebrard Casaubon por el partido Movimiento Ciudadano, por la cual buscaba alcanzar una diputación federal por la vía plurinominal bajo las siglas de dicho instituto político.

La razón jurídica de la decisión descansa en la vulneración de los principios de equidad en la contienda cometida por Ebrard, al haberse postulado al mismo cargo por 2 partidos políticos diferentes (Movimiento Ciudadano y PRD) sin que hubiera existido entre ellos convenio de coalición, conforme lo señala el artículo 227, quinto párrafo, de la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales.

Los efectos de esta decisión son interesantes.

Los ebrardistas pierden una posición clave para que su líder moral se perfile con mejores posibilidades hacia el 2018. Su designación como coordinador parlamentario del partido que lo postuló en la Cámara de Diputados era inminente, lo que le daba una excelente ubicación en el tablero político para hacer alianzas, y forjar y renovar amistades. En relación con lo anterior, subyace la idea de que la decisión judicial tiene naturaleza de sanción política, por su supuesto protagonismo en la fabricación del escándalo de la “Casa Blanca” y en el “bombardeo” del caso Ayotzinapa.

Además, este golpe jurisdiccional llega en un momento clave. Entre 2015 y 2018 no habrá procesos electorales previos a la elección presidencial en los que Marcelo Ebrard pueda participar con miras a posicionarse en el electorado para contender por la silla que dejará vacante Enrique Peña Nieto. Todo indica que la sentencia del tribunal electoral fue, como esa casilla del Monopoly o El Turista, en la que cae el jugador y tiene que regresar al inicio del recorrido.

Si las circunstancias le benefician, en 2018 el ex Jefe de Gobierno del Distrito Federal podrá volver a buscar una diputación federal o incluso un escaño en el Senado, para de ahí catapultarse a una Jefatura Delegacional o, con un cambio de domicilio, intentar ganar una Gubernatura o una Presidencia Municipal emblemática.

Su salida como precandidato en 2012 fue la primera amarilla, esta sentencia es la segunda amarilla en el partido por la Presidencia de la República.

A OJO DE BUEN CUBERO

Concluyeron las consultas sobre Justicia Cotidiana organizadas por el Centro de Investigación y Docencia Económica-CIDE. Aquí los resultados: http://justiciacotidiana.mx/swb/JusticiaCotidiana/conclusiones

Adalberto Guevara Montemayor

Abogado y autor de la columna “Acá por la sierra madre” que se publica en Epicentro y Sondeo, leo muy poco para lo que me gusta, izquierda moderada, pambolero, agricultor frustrado, litigante en reposo, activista de las causas que me mueven. Que viva Ciudad Victoria y que viva Tamaulipas con sus alegres huapangos y sus mujeres bonitas.