A menudo, iniciamos nuestro día con las mejores intenciones… y luego nos vemos atrapados en una montaña de tareas, mensajes, responder correos electrónicos… y de pronto el día ha terminado y nos preguntamos qué hicimos con el día.
Te compartimos una práctica de 4 pasos para traer más intención, atención plena y enfoque a tu día.
1.- Haz una pausa.
Cuando termines con una tarea, no vayas a la siguiente de inmediato.
2.- Toma un respiro.
Date cuenta de dónde estás, cómo te sientes, qué hay a tu alrededor.
3.- Anota lo que acabas de terminar.
Agrega la tarea a tu lista de concluido.
4.- Toma otro respiro.
Pregúntate ¿Qué quieres hacer después? puede ser otra tarea o beber un poco de agua, salir a caminar o estirarte.
Así de sencillo. Una pausa, un poco de atención, escribe lo que acabas de hacer y luego considera
lo que quieres hacer a continuación.
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Agradecemos la información brindada por parte de HISA Farmacéutica, Vicente Salazar Pérez, Alejandro Higuera de la Garza y Eduardo Peña Hernández.
