El siete veces campeón del Super Bowl, Tom Brady se pronunció en The Pivot Podcast sobre las afectaciones de algunos chistes contados en su roast de Netflix a sus hijos y aseguró, éste significa una buena lección para él como padre.
Brady tiene tres hijos, uno con Bridget Moynahan y dos con Gisele Bündchen; pese a no haber especificado qué comentarios afectaron a los menores, se sabe que la mayoría de los chistes en contra del jugador hablaban sobre su ex esposa Gisele.
«Me gustaba cuando los chistes eran sobre mí. Pensé que eran muy divertidos. No me gustó la forma en que afectaron a mis hijos», admitió el ex jugador.
Brady aseguró que este evento desafortunado lo convierte en un mejor padre, sobretodo a medida que esto avance.
«Es la parte más difícil, como el aspecto agridulce de cuando haces algo que crees que es de una manera y luego, de repente, te das cuenta de que no volvería a hacerlo por la forma en que afectó a las personas que me importan», añadió.
Pese a esto, reiteró lo divertido que fue para él esta experiencia y de quienes estuvieron presentes.
«Si no nos reímos de las cosas, lloramos. Deberíamos divertirnos más. ¿Qué amamos? Nos encanta reírnos en el camerino. Hagamos más de eso, amémonos unos a otros y celebremos el éxito de otras personas», consolidó.
El roast de Tom Brady resultó un éxito para la plataforma, convirtiéndose en uno de los eventos principales de Netflix Is a Joke Fest, fue presentado por Kevin Hart y Jeff Ross, asistieron comediantes como Nikki Glaser, Tom Segura, Andrew Schulz y más.